Recuerdo aquellos días, la desesperación por el ultimatum dado al gobierno de España, a todos los españoles, en definitiva. Dolió mucho la liberación de Ortega Lara, también secuestrado para exigir el acercamiento de los asesinos a las vascongadas. Pero lo de Miguel........... Era nuevo, no estabamos acostumbrados a aquello, yo conocí a personas que fueron asesinadas por los perros de las vascongadas, y el dolor fue tremendo, pero lo de Miguel era nuevo. Fue una manera más ruín, más cobarde, más rastrera, más............. como ellos mismos.
Reconozco que yo siempre confié en la cobardía de ETA, creía que no lo matarían. Tenía Fe en verlo vivo. Pero equivócome, lo hicieron. Y un país entero se quedó sin lagrimas de rabia y pena.
Fueron momentos en los que la gente se envalentonó, se vió empujada a salir a decirle a ETA que..... vinieran a por nosotros, somos muchos más y sucumbireis ante nosotros. Yo me enfundé en mi bandera de España y me uní a la manifestación de Sevilla en la Pasarela. Desde allí recorrí, junto a quinientasmil personas, toda la calle San Fernando, la Puerta de Jerez, La Avenida........ Durante el recorrido, gritabamos, cantabamos, llorabamos.... "Todos somos Miguel Angel", con lagrimas en los ojos deciamos; "No son vascos, son asesinos", se desgarraban las gargantas al gritar eso; Arrodillados y con las manos en la cabeza, "ETA dispara, aquí tienes mi nuca"; Canté por primera vez en mi vida "Libertad sin ira" (hoy es una canción que da sentido a mi vida). Y todo aquello cayendo lagrimas a aquel asfalto tórrido del Julio sevillano, cuando nos veíamos llorar nos abrazabamos, y más llorabamos. La gente se abrazaba sin conocerse, era..... inefable.
El empujón para que saliera toda España a la calle lo dio el pueblo de Bilbao. Ellos fueron los precursores, los que nos pusieron la piel de gallina. Tremendas fueron las imagenes de vascos presentandose en sedes de HB, que carita ponían los valientes. Existe una leyenda que dice que hubo batasunos que se cambiaron de calzoncillos dieciseis veces, de tantas veces como se cagaron de miedo, aunque no sé si son capaces de distinguir las eces de ellos mismos. Recuerdo el momento en el que manifestantes vascos gritaban a un grupo de "eces", éstos eran protegidos por la policía autónoma, y la gente les gritaba: "Ahora os protegen, a los que después vais a matar". Y el mágico momento de los pasamontañas, cuando tos los agentes se los quitaron y los manifestantes comenzaron a abrazarlos.
He de reconocer que todo esto me ha hecho llorar, no he parado de derramar lágrimas mientras escribía esto.
Pero...... Existe gentuza que se encarga de que se olvide aquella reacción ciudadana, no desean que el pueblo sepa que está vivo, que puede hacer, que si se lo propone.....
Por cierto, ¿Alguien me podría decir algo sobre las declaraciones del presidente del gobierno de España, sobre este fatídico aniversario? Aun no he oído, ni leido nada.
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