Cuando ya ha terminado la liga de Futbol y la de baloncesto está tan interesante, podemos disfrutar de este bello deporte sin interferencias futbolisticas, que siempre las hay. Siempre existen cabezas cuadradas que creen que el deporte es el futbol, ignorantes.
Pero no sólo tenemos la emocionantísima final de la ACB, sino que en Septiembre tenemos Eurobasket en España y a disfrutar con el baloncesto otra vez.
Yo hoy recordaba el mundobasket de mil novecientos ochenta y seis, celebrado también en España, y donde nuestro equipo quedó en la posición a la que estaba abonado, quinto. ¿Que se recuerda de aquel mundobasket? Pues se recuerda al jugador más bajo en jugar un campeonato del mundo, era Tyrone Bogues que medía tan sólo un metro y cincuenta y nueve centímetros. Yo además recuerdo los doce de Antonio Díaz Miguel, que en Gloria esté. Aquellos doce eran: Nacho Solozabal; Quin Costa; Chichi Creus; Juan Antonio San Epifanio; Chicho Sibilio; Jose María Margall; Jordi Villacampa; Fernando Arcega; Fernando Romay; Fernando Martín; Juan María de la Cruz y Andrés Jiménez.
De estos doce hubo muchos, concretamente ocho, que traían la medalla olímpica de Los Angeles, dos años antes, ¿pero nos acordamos de aquellos otros grandes, grandísimos jugadores que no ganaron nada con la selección, pero lo merecieron? No, no nos acordamos de los Cargol, Villalobos, Antonio Martín, Viriukov, los hermanos Jofresa, Xavi Fernandez, y tantos y tantos otros.
Pero tras el desastre de la olimpiada de Barcelona, comenzó una transformación que no empezó de cero, sino en negativo. Y llegó al cero en mil novecientos noventa y nueve, año en el que conseguimos el subcampeonato de Europa, aquel año se consiguió el mundial juvenil. Y todo ese gran trabajo culmina en el campeonato del mundo de Japón 2006. Y que dure.
¡Adoro este juego!
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